Tras otros 6 meses de espera, en junio nos llaman para comenzar con la FIV.
Nos mandan analíticas nuevamente a ambos y seminograma. Yo en ese momento estaba de oposiciones y pedí comenzar en agosto porque en junio y julio tenía exámenes. Supuestamente no había problemas y en cuanto me bajara la regla en agosto tenía que llamar para comenzar.
Organizamos las vacaciones con respecto a mi regla para en cuanto me baje estar en nuestro hogar para comenzar. Me baja, llamo y mi sorpresa es que me dicen que están bajo mínimos y que hasta octubre no puedo comenzar. Otra decepción, esto cada vez se hace más largo entre tantas listas de espera.
Dos meses antes de la consulta, tuve que usar el anillo anticonceptivo que no me sentó muy bien, noté muchos cambios hormonales, cosa que con las pastillas no noté nada.
El 24 de octubre, jamás se me olvidará, porque además coincidió con el nacimiento de mi queridisimo sobrino, comencé con el tratamiento, con muchísima fuerza y adentrándonos en un camino que no sabríamos qué final tendría.
Ese día me vieron en consulta, me vio el anestesista y me dieron la medicación. Al día siguiente, día 25 de octubre de 2.017 comencé con las inyecciones de Menopur (se ponen en la barriga entre las 18-22h y siempre a la misma hora). Me inyecté Menopur los dias 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 1, y 2, en total 9 inyecciones de Menopur.
El día 29 comencé con las inyecciones de Cetrotide (se ponen también en la barriga entre las 7 y 9h de la mañana, y también siempre a la misma hora). Me la puse los dias 29, 30, 31, 1, 2, y 3 de noviembre, en total 6 inyecciones de Cetrotide.
Y por último, el dia 3 de noviembre a las 22.20h me tuve que inyectar, una sola inyección de Ovitrelle.
Se me hizo muy pesado, estar pendiente de la hora, tener que quedar con mi padre porque mi marido trabajaba y yo no era capaz de ponerme las inyecciones sola. Luego mis ovarios crecieron muchísimo hasta el punto de tener molestias al andar y todo.
El día 4 de noviembre descanso de todos los pinchazos, por la noche tuve que tomarme un antibiótico de 1gr que me sentó fatal, me infló el estómago, con diarrea,...
El día 5 de noviembre, a las 9h de la mañana en ayunas, tenía que estar allí para entrar en quirófano a la punción. Me pusieron dos goteros, entré a quirófano temblando, muerta de miedo, me ataron manos y piernas mientras temblaba que las enfermeras alucinaban y me decían que me tranquilizara, me sedaron entera y ya no me enteré de más. Desperté muy bien, dos horas allí en observación por si acaso y para casa.
Allí mismo nos informaron que me extrajeron 9 ovocitos. Al día siguiente me llamaron para decirme que de los 9, 2 estaban vacios y de los otros 7 solo fecundaron 4. La verdad es que me decepcioné mucho porque esperaba más para tener más opciones y que me quedara alguno congelado para un hermanit@ que era mi mayor preocupación, ya que la seguridad social solo cubre el primer hijo y hasta un máximo de 3 punciones, pero si te quedan embriones congelados si te los ponen para un segundo hijo. Y dado que no tenemos un nivel adquisitivo bollante era una gran preocupación ya que no quería dejar solo a un@.
A los 3 días, el día 8, me citaron para ver a la embriologa y si todo iba bien, ponerme 1-2 embriones. Yo iba encabezonada que quería que me pusieran dos, porque así si me venian dos, pues los tenia de un golpe y dadas las circunstancias era lo mejor que podía pasarme, porque tampoco me apetecía volver a pasar por pinchazos, ... Llevaba 3 días que me costaba hasta ir del salón al baño y os aseguro que mi piso es diminuto que el trayecto son 8 pasos contados, y no podía del dolor de ovarios que tenía. Pensaron que podría haber hiperestimulado porq ese dolor tan grande, pero me revisaron antes de hacer nada y no, simplemente me habían crecido tanto los ovarios que me molestaba muchisimo.
Hablamos con la embriologa y continúan las decepciones, nos explica que de los 4 que habían fecundado, 2 de ellos eran de muy buena calidad pero los otros 2 no seguían el ritmo, eran de muy mala calidad, había tenido los dos extremos. Por lo tanto, solo me quedaban 2 embriones. Le comento mi deseo de quererme poner los dos y no me lo recomienda dado que son muy buenos y había mucha probabilidad de embarazo múltiple, y lo peor, que rara vez ocurre pero que podían dividirse estos embriones y ser más de dos!!!! Esto ya me asustó un poco, pero como era rara vez cuando ocurria eso, ¿cómo me iba a ocurrir eso? Pues seguía con la idea de que me pusieran 2, como buena tauro que soy, cabezona al máximo. Me dijo que lo dejaba en manos de la ginecóloga dada mi cabezonería, jajaja. La ginecóloga estaba de acuerdo 100% con la embriologa, dada mi edad (34 años) y la muy buena calidad de los embriones, solo me pondrían uno. Bueno, pues decepcionada y a la vez contenta por la recepción de mi embrión, me lo pusieron, no sentí dolor ninguno, al revés, sentí tranquilidad de pensar que pronto tal vez pudieramos lograr nuestro deseo de ser padres. Y tras 10 minutos, me vestí y me fui para casa, reposo relativo 24-48 horas y listo. Yo guardé reposo el tiempo de la beta-espera pero porque había tenido un pequeño accidente laboral y tenía una contractura en la espalda.
A los 12-14 días tenía que hacerme el test, pero a los 10 días comencé con dolores como de regla y ya me temí lo peor, que no había resultados positivos, y a los 11 días me hice el test, para nuestra sorpresa dio positivo. No podíamos creerlo. Al día siguiente volvimos a repetir el test y positivo.
Cuando fui al control, debía estar de 5 semanas y unos 3 días, me dicen que estoy en el límite de que se vea la bolsa, pero en la eco no se veía aún nada, se divisaba donde podía estar comenzando a anidarse pero no se veia nada claro. Así que deciden hacerme la beta en sangre, la cual me dio 20, positivo pero muy bajo. Deciden repetirla a los 2 días sin ninguna esperanza y yo me fui para casa destrozada! Estaba preparada para un negativo pero no para un positivo y luego perderlo. A los dos días me repiten la beta en sangre dándome 6, me explican que he tenido un aborto bioquímico, que sí ha habido embarazo pero que no siguió el transcurso.
Y ahora vuelta a empezar, en otra entrada os cuento el segundo intento.
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